Resolvió uno de los problemas del milenio: la conjetura de Poincaré. Tras su logro, Grigori Perelman se aisló del mundo y renunció a los galardones que premiaban su trabajo.
Las calles de Kupchino están cortadas por el mismo patrón que la mayoría de áreas suburbanas de Rusia. Salpicada de bloques de apartamentos y amplias avenidas, con un diseño t… Seguir leyendo...