El Gobierno de Reino Unido y la Iglesia de Inglaterra han unido sus fuerzas de cara al progreso. En concreto, para llevar conexión a internet a las zonas rurales. Tal y como ha afirmado la administración en un comunicado, con el objetivo de «mejorar la conectividad de banda ancha, móvil y Wi-Fi para las comunidades locales», se instalarán antenas y cables de fibra en las torres de las iglesias, una situación que no es nueva, ya que según el Departamento de Medios Digitales, Cultura, Medios y Deportes, en más de un centenar de lugares ya se emiten servicios móviles desde este tipo de localizaciones.

Como «pioneras», las diócesis de Chelmsford y Norwich ya cuentan con programas para impulsar este tipo de iniciativas. «Nuestro trabajo ha mejorado significativamente el acceso rural a la banda ancha de alta velocidad», ha afirmado el reverendo Stephen Cottrell, obispo de Chelmsford también el un comunicado recogido por The Verge. «Alentar a las iglesias a mejorar la conectividad ayudará a abordar dos de los principales problemas que enfrentan las zonas rurales: el aislamiento y la sostenibilidad».

El gobierno ha señalado que el 65 por ciento de las iglesias anglicanas y el 66 por ciento de las parroquias en Inglaterra se encuentran en áreas rurales, y sus ubicaciones están bien lozalicadas para superar los problemas de conectividad y cobertura. Sin embargo, en ningún caso se dañarían los edificios, ya que están protegidos por ley. Se estudia ampliar esta iniciativa a otras congregaciones religiosas.

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