Steve Jobs, además de ser conocido por su papel como cofundador de Apple, también era identificado por su visión única y su forma poco tradicional de realizar negocios, especialmente si estos estaban enfocados en tecnología.

Jobs creía saber lo que la gente necesitaba, algo que se reflejó en su personalidad y sentido de la estética, algo que logró llevar al éxito a Apple, pero detrás del genio, había una persona a la que se le hacía difícil convivir, que se tradujo en perder su puesto en la marca de la manzana a pesar de ser uno de los fundadores.

NeXT y el regreso de Jobs a Apple

Tras este episodio, Jobs decidió crear una empresa competidora, donde se dio uno de los momentos más cuestionado de su vida relacionado con el logotipo de su nueva compañía, NeXT, por el que gastó 100,000 dólares, una inversión que ha generado polémica y planteado dudas sobre el valor real que este tenía.

Inicialmente NeXT no tuvo éxito a pesar de su producto estrella, una computadora cúbica donde Jobs invirtió la cantidad de 650 mil dólares en un molde específico que permitía lograr esquinas perfectamente rectas de 90 grados, a un nuevo nivel de precisión y meticulosidad.

Este equipo no se vendió en grandes cantidades, pero contaba con un gran sistema operativo, a tal punto que Apple decidió comprar la compañía para recuperar la propiedad intelectual del software, …