No hay más remedio que a uno le parezca triste que un director talentoso como James Cameron, que nos ha regalado peliculones como la multioscarizada Titanic (1997) o Avatar (2009), tarde tantísimo tiempo en tener listo un nuevo filme de ficción. Igual que Stanley Kubrick, salvando las distancias. Por supuesto, hay buenas razones; conseguir la […]