El Xoloitzcuintle (o perro sin pelo mexicano) es una raza canina que se asocia con los mexicas, debido a que pensaban que eran sus guías hacia el más allá. Estos perros eran sacrificados y enterrados junto con sus dueños para poderles abrir el camino al inframundo.
Debido a su aspecto pelón, no muchas personas los consideran atractivos para tenerlos como mascota, pero he de decir que funcionan perfectos como calentadores para las noches de invierno ya que su temperatura promedio es de 40º, pues la ausencia de pelo, hace que pierdan calor más rápidamente que otras especies peludas.
Un regalo para Xolotl y comida para los mexicas
Si cuando te contábamos del Axolotl te mencionábamos al dios Xolotl, esta vez hay que nombrarlo nuevamente, ya que según antiguas leyendas este perro fue un regalo de ese dios a los antiguos pobladores de México. Durante muchos años fue muy apreciado por su carne, y era consumido regularmente por los mexicas sobre todo en banquetes de boda y funerales, constituyendo una fuente esencial de proteínas para los mexicanos de antaño.
Vía W. E. Mason, 1915
El Xoloitzcuintle es considerado como un perro hipoalergénico, ya que al no tener pelo, no puede causar alergia en las personas que son alérgicas al pelo de los perros, además esa ausencia de pelo tampoco propicia el que tengan pulgas. La raza se remonta a entre 3mil y 5 mil años atrás, aunque de acuerdo con investigaciones antropológicas de la UNAM puede citarse …