La Xbox One S, nueva versión 40% más pequeña de la consola de sobremesa de Microsoft fue presentada hace tan solo un par de meses, y tal como fue dicho, ayer 2 de agosto comenzó su andadura en el mercado estadounidense.

Como es ya costumbre, no han sido pocos los medios que ya han puesto sus manos sobre esta nueva consola, siendo iFixit uno de los primeros en hacerse de una unidad y destriparla, como es su costumbre, dando a conocer algunos detalles interesantes de su diseño.

Entre los comentarios de los expertos del mencionado sitio está que en el proceso de encoger el cuerpo de la consola no se sacrificó ningún detalle, ya que todo es gracias a un diseño modular con una mucho mejor distribución que aprovecha al máximo cada espacio de la placa base.

Por otro lado, EuroGamer también puso las manos encima de la One S y descubrió que el poder de procesamiento se ve incrementado en un 7.1 %, respecto a su antecesor, gracias a a la nueva GPU que corre a una frecuencia de 914 Mhz; esto resulta en un desempeño que pasa de 1.31 teraflops a 1.4 teraflops.

Sin embargo, este aumento en la capacidad de procesamiento no se refleja en un mejor desempeño general al momento de jugar sino que la mejora gráfica depende del título y el tipo de gameplay que ejecute.

Queda claro que Microsoft no pretende renovar aún el mercado de las consolas de sobremesa sino impulsar …