La actualización de primavera de Windows 10 está a la vuelta de la esquina, y para preparar nuestros equipos antes de la llegada de la esperada versión 21H1, Microsoft ha lanzado un parche obligatorio para todos los sistemas.

La actualización KB4023057 incluye una serie de "mejoras en la confiabilidad de Windows Update" para todas las versiones de Windows 10 desde la 1507 hasta la 20H2. El parche viene a lidiar con una serie de problemas que podrían impedir que futuras actualizaciones importantes sean instaladas y añade varias mejoras para el proceso de instalación de las mismas tras ser aplicado.
Qué hace el parche

La actualización tiene cinco características fundamentales, como explican en la web de soporte de Microsoft, el objetivo es ayudar a mejorar la fiabilidad y seguridad de los dispositivos con Windows 10. Tras instalar el parche WIndows Update podrá:

Solicitar que tu dispositivo permanezca encendido por más tiempo para habilitar la instalación de actualizaciones.
Intentar reiniciar tus ajustes de red si se detectan problemas, e incluso limpiar claves de registro que pueden evitar que las actualizaciones futuras se instales exitosamente.
Reparar componentes deshabilitados o dañados del sistema operativo que determinan si ciertas actualizaciones aplican a tu versión de Windows 10.
Comprimir archivos en el directorio de tu perfil de usuario para ayudar a liberar suficiente espacio en el disco para poder instalar actualizaciones importantes.
Reiniciar la base de datos de Windows Update para reparar problemas que pueden prevenir la instalación de …