Publicado originalmente en Xataka
El skiplagging (saltarse vuelos) es una práctica conocida desde hace tiempo: gracias a esta técnica es posible viajar más barata en avión. En muchos viajes ir de A a B es más caro que ir de A a C pasando por B, así que los usuarios cogen esa última opción y no utilizan el último vuelo de B a C.
Curiosamente las mismas aerolíneas que establecen esas tarifas con misteriosos algoritmos para maximizar beneficios ahora culpan a los usuarios de aprovecharlas. Lufthansa ha demandado a uno de sus pasajeros por este tipo de prácticas, pero la guerra legal de estas empresas contra esta práctica viene de lejos y ha causado un nuevo caso del "efecto Streisand".
Las aerolíneas tratan de controlar un problema que ellas mismas crearon
Noviembre de 2014. La aerolínea United Airlines y Orbitz Worldwide demandan a Aktarer Zaman, el creador de Skiplagged.com. Esta pequeña startup ayudaba desde hacía meses a viajeros a "hackear a las aerolíneas" y aprovechar sus misteriosos sistemas de tarificación de vuelos encontrando ofertas especiales a través de las tarifas con las llamadas "ciudades ocultas".
Ejemplo de la técnica de skiplagging: ir de Nueva York a San Seattle vía San Francisco (y no coger el último vuelo) acaba saliendo mucho más barato que coger un vuelo directo de Nueva York a San Francisco.
El sistema era conocido desde hacía mucho tiempo por parte de aerolíneas y agencias de viajes, pero el público …