Cuando se presentó Dall·E, y al poco tiempo, otros algoritmos generativos de tratamiento de imágenes como Midjourney o Stable Diffusion, sus problemas se pusieron rápidamente de manifiesto: las compañías que los habían creado habían acumulado enormes colecciones de imágenes etiquetadas con descripciones, y las habían utilizado para entrenarlos. ¿De dónde habían sacado esas enormes colecciones …