Cada vez resulta más complicado identificar deepfakes. Las imágenes falsas de personas reales pueden resultar casi imperceptibles bajo la mirada humana, pero una nueva técnica basada en la astronomía es capaz de hacerlo con un correcto margen de error. Para ello compara los reflejos de cada ojo de una imagen y, especialmente, el grado de asimetría de lo que reflejan.El secreto de sus ojosSegún indica un reciente artículo de la revista Nature sobre el trabajo los investigadores Adejumoke Owolabi y Kevin Pimbblet, de la Universidad de Hull, el secreto para averiguar si una imagen es verdadera o falsa se encuentra en los ojos. En las fotografías reales, tanto el ojo derecho como el izquierdo muestran prácticamente el mismo reflejo. Sin embargo, en muchas ocasiones los deepfakes no valoran esto, por lo que lo que reflejan sus ojos delata que no son una fotografía real.Todas las miradas son falsas. En la columna derecha se detectan los fallos (Crédito: Adejumoke Owolabi (CC BY 4.0)De todos modos, en los deepfakes a veces las diferencias resultan mínimas e imperceptibles a primera vista. Por ello Owolabi emplea una técnica astronómica compuesta por dos partes: el sistema CAS y el índice Gini, dos técnicas para analizar la luz en imágenes astronómicas. Se compara cada ojo para detectar las incorrecciones de asimetría y comprobar si la imagen es falsa o verdadera.Sistema CAS: cuantifica la concentración, asimetría y suavidad de la distribución de luz en un objeto.Índice Gini: calcula la desigualdad en la distribución de la luz en …