Investigadores han detectado por primera vez deformaciones en el suelo oceánico de la Fosa de Atacama, lo que podría estar vinculado a la acumulación de energía tectónica. Este hallazgo plantea nuevas preguntas sobre la posibilidad de un gran terremoto y su impacto en la región. ¿Estamos ante una señal de advertencia? Descubre los detalles detrás de este avance crucial.