Disfrutar de la Realidad Virtual es sorprendente. Poder ver escenarios inmersivos, escuchar música, ver el cielo nocturno en medio del desierto de Atacama… personalmente es uno de mis momentos preferidos del día, pero sería aún mejor si pudiera sentir lo que «toco virtualmente», aunque eso significara morir de infarto en los escenarios de terror. El… Continúa leyendo »