Epidemic Sound es un banco de música y efectos de sonido libre de royalties, que los youtubers, tiktokers, streamers y otros creadores de contenidos pueden usar en sus vídeos a cambio de una suscripción. 35.000 canciones y 90.000 efectos están a disposición de sus más de 100.000 usuarios. Por sólo 9 euros al mes, los usuarios personales (es decir, los que no son empresas ni generan contenidos para ellas) pueden monetizar libremente en sus propios canales los vídeos que creen de este modo.
Lo que hace atractivo este servicio para los creadores de contenidos es el hecho de que tienen la seguridad de que no serán sometidos a denuncias por derechos de autor ni a reclamaciones de Content ID, y que —por tanto— no tendrán sobre sus cabezas la espada de Damocles de una eventual pérdida o desmonetización de su cuenta. ¿Y los usuarios corporativos? Ellos también tienen acceso a la biblioteca de Epidemic Sound… sin embargo, tienen que pagar cantidades mucho mayores para ello.
El problema de Epidemic Sound es que entiende que uno de los mayores usuarios potenciales de su servicio ha decidido ignorar sus condiciones de uso, e incorporar gran parte de la biblioteca de Epidemic (el 94% de la misma, afirman) a la suya propia, a disposición gratuita de sus millones de usuarios, para que puedan usarlos en los vídeos que creen y compartan en su plataforma sin que Epidemic Sound vea ni un céntimo por ello. Hablamos nada menos que de Meta, la compañía propietaria …