Mucho hemos hablado en estos últimos meses sobre la polémica generada por la nueva Ley Orgánica de Protección de Datos (LOPD), por la que los partidos políticos se van a convertir en el «Gran Hermano» de sus ciudadanos. Y es que la nueva medida, que está pendiente de ser recurrida por parte del TC, permite que los políticos, a través de dispositivos electrónicos, envíen propaganda electoral a los ciudadanos sin previa autorización.
Pero algo bueno tiene que tenía que tener la nueva normativa. Y es el derecho a la desconexión digital en el ámbito laboral, tal y como recoge el artículo 88. ¿Qué significa? Muy sencillo: tu jefe no puede molestarte por WhatsApp, por ejemplo, cuando ya has salido de trabajar. Tampoco llamarte continuamente o mandarte emails.
«Los cambios en la norma viene a contemplar expresamente situaciones de abusos que se producían en muchas empresas y que podían impedir el descanso del trabajador», explica a ABC Sergio Carrasco, experto en derecho digital de Fase Consulting. «Aunque ya existían delimitaciones asociadas a la propia jornada, la realidad es que no resultaba extraño encontrar a empresas que mantenían y mantienen una comunicación continua con sus trabajadores a través de canales como WhatsApp, exigiendo una respuesta o confirmación de lectura de los propios mensajes», explica.
El derecho a la desconexión digital se aprobó en septiembre de 2018 en el Congreso de los Diputados. «Los trabajadores y los empleados públicos tendrán derecho a la desconexión digital a fin de garantizar, fuera del tiempo …