Amazon acaba de sufrir un duro revés en Alemania ya que un tribunal alemán, a instancias del grupo defensor de los derechos de los consumidores Verbraucherzentrale NRW, declara ilegales los botones Dash de la compañía, esos botones del tamaño de un pulgar y conectados vía Wifi, que permite a los usuarios comprar rápidamente artículos básicos