La conducción autónoma es uno de los desafíos más importantes de la sociedad. Los ensayos, en su conjunto, han sido satisfactorios aunque todavía no se ha logrado alcanzar sus fases más avanzadas. Queda mucho camino por recorrer para poder asistir a un cambio socioeconómico pero también ético y moral.
Pese a los últimos años accidentes registrados, la evolución y transformación del coche ya es imparable. Son muchas las compañías implicadas; fabricantes de automoción buscan su mejor pareja de baile con emergentes firmas tecnológicas y grandes empresas que se han involucrado. Una de las que se ha rumoreado que estaba por la labor era Apple, aunque nunca ha habido confirmación oficial por su su parte dado el hermetismo que se gasta la firma de la manzana.
En muchas ocasiones, conocer los planes de las compañías se produce de manera fortuita. Inesperada si cabe. En los futuros teléfonos móviles, por ejemplo, suele venir a partir de una filtración de algún proveedor, de los acuerdos de las teleoperadoras, del fabricante de fundas o, hay que decirlo, es muy probable que esos titulares que aparecen cada semana sean filtraciones controladas por la propia marca.
En esta ocasión, los planes acerca de un coche autónomo de Apple se han podido conocer después de una denuncia (PDF, en inglés) en contra de un exempleado de Apple (Xiaolang Zhang) que está acusado de robar secretos comerciales y de propiedad intelectual de la compañía tecnológica. Todo ha dado pie a una investigación del FBI que …