Desde el 2020, Telefónica, como titular de los derechos de emisión del fútbol en nuestro país, cuenta con permiso judicial para ordenar a otras operadoras el bloqueo de webs y servicios online sin supervisión de un juez. Hace casi tres meses, LaLiga y Telefónica/Movistar lograron la renovación de dicho permiso, durante más tiempo y con un margen de entrada en vigor de los bloqueos más breve (sólo 3 horas) para impedir el acceso desde España a cualquier dominio de Internet y/o dirección IP que consideren que emiten en directo fútbol sin permiso de los titulares de los derechos.
Sin embargo, los objetivos de Telefónica y LaLiga van mucho más allá. Hasta el punto de que han empezado a perseguir (con mayor o menor suerte) servicios y tecnologías que en modo alguno son ilegales, sólo porque teóricamente pueden ser usados para acceder a emisiones de partidos.
Así, en abril LaLiga solicitó a la Unión Europea prohibir 85 aplicaciones IPTV... sin justificar por qué las considera ilegales. Dado que la Comisión Europea hizo oídos sordos a la petición, LaLiga y Telefónica decidieron recientemente tomar medidas por su cuenta, bloqueando el acceso a la web de una de las aplicaciones IPTV más populares, AceStream, un fork del popular VLC Media Player. Sus desarrolladores, sorprendidos, explicaron así que ellos no estaban violando el copyright de nadie:
"Ace Stream no es un proveedor de contenido ni un servicio de alojamiento. No publicamos ni almacenamos ningún contenido de video o audio. Esto excluye automáticamente la …