El fabricante de automóviles japonés comunica una inversión estratégica en Uber y alquilará sus coches a los conductores de la empresa de transporte.
No se ha dado a conocer la cuantía de la inversión, pero Toyota trata la inversión como un acuerdo estratégico entre ambas compañías para tantear colaboraciones más profundas. Comenzarán realizando varias pruebas en países donde compartir vehículo esté en expansión, tomando en cuenta la regulación existente en cada escenario, las condiciones de negocio y las necesidades de los clientes según mercado.
El principal acuerdo es el arrendamiento de vehículos de la marca japonesa a los conductores que trabajan para ofrecer el servicio. Curiosamente, la empresa emergente californiana llegó a un acuerdo con el fabricante alemán Mercedes-Benz para comprar 100.000 berlinas de lujo Mercedes Clase S. Es obvio que los planes de futuro de Uber no sólo pasan por la conducción autónoma y el desarrollo constante de su tecnología, también necesitan aliados que puedan conseguirles una gran cantidad de vehículos.
Los acuerdos con empresas emergentes de transporte privado son de vital importancia, les asegura miles y miles de ventas en vehículos, que además suelen ser de alta gama debido a su propósito profesional.
Volkswagen ha invertido 300 millones de dólares en Gett, la compañía de transporte que opera en Tel Aviv. General Motors invirtió 500 millones de dólares en Lyft, el principal rival de Uber en su mercado natal y, recientemente, Didi Chuxing, la empresa de transporte privado líder en China, recibió una cuantiosa inversión de Apple este mes.
Ya no quedan muchas …