Hace no mucho, se creía que el ebook iba a imponerse al libro de papel de igual manera que el MP3 se imponía al CD o que, más tarde Netflix se impuso al DVD. Pero ese 'sorpasso' nunca ha llegado a tener lugar, en gran parte por la importancia del factor 'tacto de papel'. Y los cómics -una categoría particular de libros, al fin y al cabo- no han sido ninguna excepción en ese sentido.
Sin embargo, eso no significa que el cómic digital no tenga su cuota de usuarios, e incluso su pequeño ecosistema de software y plataformas: cuenta con sus propios formatos de archivo, con sus programas de lectura y organización de colecciones, y con sus propios sitios de descarga de referencia.
CBR, CBZ, CBT
De igual manera que los ebooks -aunque podamos encontrar muchos de ellos en el omnipresente PDF- cuentan con sus propios formatos de fichero (Epub, Djvu, Mobi, Lit, etc), los cómics digitales cuentan también con los suyos propios: CBR, CBZ y, en menor medida, CBT, CB7 y CBA.
Aunque, quizá, sería más correcto hablar de 'extensiones de fichero', y no de formatos, pues los tres tipos se corresponden con formatos ampliamente utilizados de empaquetamiento y/o compresión de archivos: los CBR no son más que archivos RAR; los CBZ, ZIP; los CBT, TAR; los CB7, 7z; y los CBA, ACE.
En Genbeta
¿Qué son los archivos CBR o CBZ y por qué se usan para …