La nueva campaña publicitaria del remake de Ghostbusters en España es un despropósito, empezando por Cremades y terminando por las cazafantasmas escogidas.
La noticia de que Ghostbusters tendría un remake para 2016 fue acogida con dosis de emoción y escepticismo a partes iguales, o casi. El hecho de que esta vez serían cazanfantasmas, en femenino, despertó polémica. Cómo no. Pero se fue superando y poco a poco el discurso se centró en lo verdaderamente importante: la calidad de la cinta. Era importante que, igual que con una Hermione negra o una potencial Elsa lesbiana, no se desviase la atención de lo importante. Bueno, Sony acaba de lograrlo con una campaña publicitaria que roza la tragedia.
"jajajaja k crack jorge cremades puto amo"Para empezar, Jorge Cremades. No Cremades, no party. No voy a descubrir a estas alturas quién es él, si alguien todavía le desconoce puede echar un ojo al estupendo artículo de Álvaro Rigal en El Confidencial: No te lo vas a creer, Jorge Cremades: a mí me gusta mi novia. La tesis de Cremades siempre es la misma: las chicas están muy buenas y perdemos el culo por ellas, pero qué horrible es tener que aguantarlas y no poder pasar la mayoría del tiempo haciendo el húngaro con nuestros amigos.
Se podría argumentar que el uso de Cremades es puramente paródico, y que incluso quien sale peor parado es él. Mientras una multinacional sigue apostando por un personaje que ha construido su fama alrededor de la cosificación de la mujer, la sociedad …