La obligación desde la Comisión Europea a que Apple pague 13.000 millones de euros al gobierno de Irlanda no sólo ha protagonizado la actualidad tecnológica de todo el mundo, sino que también se ha colocado en todas las portadas de los medios generales. Todo el mundo se ha puesto a hablar de ello.
Y como suele pasar cada vez que el tema de los impuestos que paga Apple en cada país sale a la palestra, muchos se centran en si el sistema que usa la compañía de Cupertino (y otras grandes tecnológicas como Google o Facebook) es legal o no. Hay varias cosas a puntualizar, pero lo cierto es que Apple no está quebrantando la ley con la forma que tiene de pagar sus impuestos.
No "cuanto" sino "cómo" y "dónde"
Lo primero a tener claro es que esta batalla no es para que Apple pague impuestos: ya los paga. A nivel mundial, como aclara Eduardo Archanco, ha pagado más de 80.000 millones de dólares en impuestos entre los años 2003 y 2015. El problema aquí es quién recibe esos impuestos, o dicho de otro modo: cómo se reparten.
Y las leyes dictaminan un sistema que Apple, como el resto de compañías, intentan exprimir tanto como pueden pero siempre dentro de la ley: Apple tiene la sede europea en Irlanda, país donde los impuestos son más aventajados para ella, y desde ahí puede utilizar empresas filiales en cada país europeo para recoger los ingresos de todos los mercados.
Apple …