Desde que se lanzó el primer videojuego de la historia, varios movimientos conservadores han intentado satanizar esta forma de entretenimiento. Comenzando por supuestos problemas de agresividad favorecidos por los videojuegos, hasta la posibilidad de crear adicción —aunque esta última sí que depende de muchos factores—. Sin embargo, en los últimos años se ha demostrado que […]