No es secreto que internet es un campo abierto para encontrar toda clase de contenidos y esto es tan bueno como peligroso. Los principales jugadores de web han invertido años y grandes recursos para limitar la propagación y acceso de información sensible. No obstante, los usuarios parecen el principal obstáculo para lograrlo. Lo que pasa en Spotify es claro ejemplo.
Cuando pensamos en esta red social, lo primero que se viene a la mente son playlist, podcast o canciones viejas y actuales para acompañar nuestras rutinas.
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No obstante, un informe de Vice ha dejado ver que hay un «lado obscuro en el servicio» que, violando las condiciones de uso, ha comenzado a inundar la plataforma con contenidos sexuales explícitos para adultos.
Y es que una serie de usuarios están asociando playlist y podcasts con imágenes sexuales explícitas, lo que claramente no es permitido por Spotify.

Adicional, se menciona la existencia de perfiles que de manera regular suben contenido sexual para adultos en forma de audio, al cual se puede acceder desde la barra de búsqueda con palabras nada relacionadas al tema. Buscar una coma o un punto, en muchos casos, bastaba para encontrar el contenido.
Gran parte de estos contenidos, según Vice, eran relatos eróticos generados por una voz de ordenador. Aunque algunos de los materiales utilizaron voces reales.
Spotify frente a los contenidos sensibles
Lo encontrado es un nuevo ejemplo de cómo los usuarios han encontrado la manera de esquivar ciertas restricciones que servicios como Spotify …