Lo que antes era algo anecdótico está empezando a extenderse en la industria. Más fabricantes de smartphones de gama baja y media se suman a no incluir accesorios para rebajar coste.
En un mundo alejados de los iPhone y los Galaxy de gama alta, los fabricantes de smartphones de gama baja y media tienen que pelear cada venta. Con muchas características similares entre los modelos de todos los competidores, la decisión final se reduce al precio e imagen percibida de marca.
Como ejemplo, Huawei hace años era una marca desconocida por el gran público. Su nombre exótico causaba recelo y hacía a los clientes optar por marcas con más veteranía en los escaparates como Motorola o Samsung. Gracias a la presión de marketing y a un trabajo continuado, Huawei ahora puede presumir de estar mucho más presente en la mente de los consumidores occidentales.

Pero hoy en día, cuando el público tiene que decantarse por un móvil aparentemente idéntico de 200 euros u otro de 210 euros, la gran mayoría optará por ahorrarse los 10 euros. ¿Qué podemos hacer? La gente mira las especificaciones por encima, suelen fijarse en “los núcleos”, la cámara y el almacenamiento total, incluyendo si hay soporte SD. El diseño importa, pero hay gamas en las que es totalmente indistinguible comprar una u otra marca. Esos 10 euros de diferencia acaban afectando al contenido de la caja.
Si por ciertos fabricantes fuera, tendríamos que ir nosotros a recoger el smartphone a la fábrica
El usuario compra un smartphone. Así que …