Por José María López para ThinkBig. Por mucho éxito que tengan Facebook y WhatsApp, el correo electrónico sigue siendo la principal vía de comunicación para muchos internautas, y esto afecta tanto al ámbito personal como especialmente al profesional.
Nadie se libra de recibir decenas de mensajes diarios, incluso el primer día de trabajo. Y si hablamos de los mensajes con varios destinatarios, nada que envidiar a los grupos de padres de WhatsApp.
Pero con unos sencillos consejos y ciertos hábitos fáciles de interiorizar podemos mantener el orden de la bandeja de entrada y mantenerla al mínimo.
Ahorraremos tiempo, no tendremos que consultar la bandeja cada dos por tres, y cuando llegue un nuevo correo electrónico no nos llevaremos las manos a la cabeza.
Empieza por archivar
Partimos de una bandeja de entrada repleta de mensajes. Por unos motivos u otros, tenemos la bandeja de entrada a rebosar, por lo que lo primero que deberíamos hacer es empezar a archivar los mensajes.
Los únicos mensajes que deberíamos mantener en la bandeja de entrada son aquellos que requieran una acción por nuestra parte (ir a una reunión, entregar un informe), o si estamos esperando algo (que nos respondan a una duda o nos envíen cierto documento).
Todos los demás, si no nos van a servir para nada en el futuro, directos a la Papelera, y los que te resulten útiles o temas borrar, conviene archivarlos.
Según la herramienta que utilices, como Gmail de Google, Microsoft Outlook (de escritorio o web), Mail de Apple o Thunderbird, entre otras, puedes usar carpetas …