Uno de los retos a los que se enfrentan los smartphones plegables son la durabilidad, como demuestran los problemas que afectaron al Galaxy Fold original.
Los Galaxy Z Flip y Z Fold2 ideron un salto significativo en la calidad de construcción, refinando el diseño y mejorando en gran medida el mecanismo de la bisagra.
Incluso con esos cambios, seguía habiendo una ausencia importante en un smartphone de precio tan elevado: la resistencia al agua.
Esta ausencia no es casual, ya que es mucho más difícil impermeabilizar algo con partes móviles. Por suerte, Samsung parece haber encontrado la forma de proteger los próximos Z Flip2 y Z Fold3 frente a la entrada de agua.

Samsung Galaxy Z Flip

Según SamMobile, hay rumores de que estos teléfonos tendrán una clasificación IP formal, pero se desconoce qué nivel de protección podría ser. El Galaxy S21 Ultra tiene una clasificación IP68, lo que significa que resiste 30 minutos bajo 1,5 metros de agua.
Aunque IP68 podría ser demasiado a día de hoy, una clasificación IP53 sería posible. El Google Pixel original tenía la certificación IP53, haciendo que el teléfono fuera «a prueba de salpicaduras». Aunque no estaba protegido contra la inmersión total, podía resistir pequeñas cantidades de agua sin presión, como la lluvia.