Samsung ha querido defenderse de las acusaciones de falta de seguridad que han recaido sobre su último terminal, el Galaxy S8, después de la publicación de un vídeo en el que el grupo de «hackers» Chaos Computer Club la sencillez con la que habían «hackeado» el escáner de iris del terminal.
«Aunque el video de un minuto (que muestra que el sensor está siendo engañado con un ojo falso) parece simple, es difícil ver que suceda en la vida real», ha asegurado un portavoz de Samsung a «The Korea Herald».
Según la compañía, se tienen que dar muchos factores para que cualquiera pueda burlar la seguridad de este patrón de seguridad biométrico: «Se necesita una cámara que pueda capturar la luz infrarroja (utilizada en el video), que ya no está disponible en el mercado. También, se necesita tomar una foto del iris del dueño y robar su 'smartphone'. Es difícil que todo el escenario suceda en la realidad».
Chaos Computer Club ha publicado un vídeo en el que demuestra cómo es posible burlar el sistema de escáner de iris del Samsung Galaxy S8 empleando solo una fotografía del propietario del «smartphone» y una lentilla para demostrar que los sistemas de autenticación biométrica «no cumplen con su premisa de seguridad».
El sistema, que fue incorporado al S8 de forma pionera, consigue que el usuario pueda desbloquear su «smartphone» o acceder directamente a determinadas funciones.
El problema, para muchos expertos en seguridad, es que el escáner de iris va camino de convertirse …