Rocket Lab ha lanzado con éxito hace unas horas la misión We Love The Nightlife desde su Complejo de Lanzamiento 1 en Nueva Zelanda. En ella un cohete Electrón ha puesto en órbita un satélite de obtención de imágenes mediante radar de apertura sintética de Capella Space. Pero la gran novedad es que uno de los nueve motores Rutherford de la primera etapa era un motor ya utilizado en un lanzamiento previo.
El motor reutilizado está abajo a la izquierda; se distingue porque está «churruscadito» – Rocket Lab
Al principio de su carrera Rocket Lab no intentaba recuperar ni reutilizar las primeras etapas de los Electrón. Pero desde hace algún tiempo está trabajando en recuperarlas y reutilizarlas. Y de hecho la primera etapa del lanzamiento de hoy ha sido pescada en el mar tras su amerizaje para su futura reutilización.
La idea es poder reutilizarlas completas tras la pertinente revisión, pero por ahora lo que están estudiando es cómo hacerlo. Las medidas más recientes que han tomado al respecto son las de aislar mejor el interior del cohete para que el agua del mar llegue a menos sitios.
Recovering Electron rockets: an explainer pic.twitter.com/y2vOMmPEbC— Rocket Lab (@RocketLab) August 24, 2023
Aunque, como decía arriba, en el lanzamiento de hoy lo que han hecho es utilizar un motor que ya había volado al espacio, que ya había pasado por el agua, y que ya había sido revisado y probado y que ha funcionado a la perfección. Y eso es una …