Me resultaba difícil de creer que Capcom fuese capaz de hacer un nuevo Monster Hunter que no sólo tuviera la capacidad de satisfacer a los fans sino que, además, pudiese ofrecer algo con lo cual atrapar a más nuevos jugadores; un título que brindara un idea mucho más sencilla de lo que es su concepto pero que no tuviese que sacrificar nada de esa experiencia tan profunda que los gamers más veteranos esperarían de ella. Para mis sorpresa, la compañía me ha demostrado que esto era posible y lo ha hecho por medio de Monster Hunter Generations,