Hay un dicho que dice: “sólo hay dos cosas certeras en la vida, la muerte y los impuestos.” A esta frase le agregaría “y un juego de LEGO por cada propiedad intelectual exitosa en la vida.” Pero este no fue siempre el caso. Los primeros títulos basados en los bloques más famosas del mundo, salieron al mercado a finales de los 90’s y eran experiencias originales, ninguna estaba basado en propiedades previamente existentes. No fue sino hasta 2001 que Harry Potter cambió todo. Esta película tomó por sorpresa a todo el mundo y rápidamente se volvió un gran negocio, así que las grandes compañías no tardaron en aprovechar esta situación y dentro del océano de mercancía, LEGO decidió adaptar la cinta en una serie de bloques que eventualmente evolucionaron en un juego desarrollado por Superscape. Como dice otro dicho: “el resto es historia.”