Boris Johnson, Primer Ministro británico, concedió esta semana un rol limitado a la empresa china de tecnología Huawei, en el marco del desarrollo de las redes móviles de 5G del Reino Unido. Con esta medida, se resiste a la presión ejercida por los Estados Unidos para excluir a la empresa de telecomunicaciones de la siguiente generación de redes móviles con el miedo de que China podría usarlas para robar secretos de estado.
En una de las primeras y más grandes pruebas que tiene el Reino Unido en sus políticas post-Brexit a la fecha, Johnson decidió que “vendedores de alto riesgo” solo podrían ser permitidos en partes “no sensibles” de las redes 5G, especificando que su grado de intervención no pasaría del 35%.
Huawei podría ser excluida del núcleo sensible de la red, en donde la información es procesada, además la empresa estaría prohibida de todas las redes críticas y ubicaciones sensibles, como por ejemplo sitios nucleares y bases militares, informó el gobierno británico.
La decisión causará consternación en la administración de Donald Trump, la que teme que China podría utilizar a Huawei para robar secretos de estado. Preocupación que fue advertida y que tendría consecuencias en términos de cooperación de inteligencia entre Londres y Washington si el Reino Unido decidía darle un rol a Huawei en sus redes 5G.
“Esta es una solución específica para Reino Unido para razones específicas del Reino Unido, y la decisión trata con los desafíos que enfrentamos ahora”, explicó Nicky Morgan, Secretario de Comunicaciones, luego de una reunión en …