Aunque su nombre es diferente, se trata del mismo teléfono comercializado por Xiaomi hace poco en India. Allí se llamó Redmi Note 9 Pro y Max, mientras que para el resto del mundo se queda en Redmi Note 9S. El terminal, presentado desde Malasia en un evento online (en el que no faltaban ni los aplausos pregrabados), es una nueva vuelta de tuerca para aquellos que quieren tener muchas prestaciones a un precio imbatible. De hecho, el nuevo smartphone de Xiaomi costará poco más de 200 euros.

Estamos ante una pantalla Full HD+ de 6.67 pulgadas, protegida por Gorilla Glass 5 (también en la parte trasera) y con un formato de 20:9. Las dimensiones del dispositivo, muy en la media, son de 165.5 x 76,4 x 8,8 mm y su peso de 209 gramos. El ratio de pantalla supera el 91%.

Por supuesto, no podíamos esperar que un teléfono de este precio montara el más reciente y poderoso procesador de Qualcomm, pero sí que incluye un Snapdragon 720G, un procesador especialmente pensado para juegos, con su propia Inteligencia Artificial y más que suficiente para desenvolverse con fluidez incluso en las «apps» más exigentes. Según Xiaomi, es el terminal con mayor rendimiento y prestaciones de su categoría.

La memoria RAM es de 6 GB, mientras que para almacenamiento tendremos 64/128 GB. Xiaomi, además, ha mantenido el puerto de expansión de memoria, de forma que podremos añadir una tarjeta Micro SD de hasta 512 GB adicionales.

Lo que sí que sorprende es …