He estado probando el nuevo Kindle básico de 2019, que por fin incorpora una pantalla iluminada, una carencia que hasta ahora me había impedido recomendarlo. De hecho siempre que alguien me pregunta por un lector de libros electrónicos le digo que lo primero que ha de asegurarse es de que tenga luz.
En el Kindle de 2019 la luz proviene de cuatro ledes repartidos a intervalos regulares en la parte inferior de la pantalla. Esto hace que en la parte superior el brillo de la luz sea un poco menos intenso, aunque no se nota demasiado ni molesta a la hora de leer. La intensidad de la luz es regulable en 25 pasos desde apagada hasta el máximo, aunque el ajuste hay que hacerlo a mano, ya que no incorpora sensor de luz ambiente.
La pantalla, fabricada por Amazon, es de 6 pulgadas con 167 puntos por pulgada de resolución y 16 tonos de gris. Como en todos los Kindle, la pantalla es antireflejos, así que puedes usarla en exteriores sin problema. Es una resolución menor que la del Paperwhite o la del Oasis, que tienen 300 ppp. Pero para lectura de texto no es un problema, aunque si te pones tiquismiquis en ciertas combinaciones de tipo de letra y tamaño, como se puede apreviar en la imagen de abajo, puedes ver como el punto de la i se une a la letra, por ejemplo.
Kindle de 2019 (izquierda) vs Oasis original (derecha)
La menor resolución es más apreciable si …