.@British_Airways terrifying experience on flight to Valencia. Felt like horror film. Thankfully everyone safe. Flight filled with smoke and had to be emergency evacuated. #britishairways pic.twitter.com/NT4Gtme9kl— Lucy Brown (@lucyaabrown) August 5, 2019
El vuelo BA422 de British Airways del 5 de agosto de 2019, con origen en Heathrow y destino Valencia tuvo que aterrizar de emergencia en el aeropuerto de destino después de que unos diez minutos antes del aterrizaje la cabina de pasajeros se llenara de humo. El avión fue evacuado en la pista mediante las salidas de emergencia sin que hubiera que lamentar más que algunas heridas por abrasiones al parecer producidas por el roce con las rampas.
Pasado el susto algunos pasajeros comentaban medio indignados –cómo no– en redes sociales que si no habían funcionado las mascarillas de oxígeno. Pero es que en caso de humo en cabina no está recomendado su uso.
La normativa vigente exige que las aeronaves que vuelan por encima de cierta altitud lleven oxígeno para todos su ocupantes, con una reserva extra por si acaso. Ese oxígeno podría ir almacenado en bombonas. Pero eso ocupa mucho y pesa, así que lo más habitual es utilizar generadores químicos que se activan al tirar de la mascarilla. Una vez activados dentro de estos generadores se pone en marcha una reacción química que aparte de oxígeno produce calor. Mucho calor. De hecho el vuelo 592 de ValuJet se estrelló cuando se activaron unos generadores de oxígeno incorrectamente almacenados que iban en su bodega de …