Huawei y Google iniciaron las negociaciones para el desarrollo de los nuevos Pixel de Google, pero, en cierto punto, fracasaron. ¿Por qué?
En 2015, Huawei y Google sellaron su alianza a nivel mundial con el Nexus 6P, el primer dispositivo que involucró directamente a ambas compañías en su desarrollo. El resultado fue increíble, y el Nexus 6P se convirtió fácilmente en el mejor Nexus que hemos visto en años. En 2016, los ojos volvían a centrarse en Huawei para su sucesor, pero en algún punto intermedio, los caminos de Google y Huawei comenzaron a separarse.
Según informa Android Police, Huawei y Google iniciaron las negociaciones para producir los nuevos Pixel de Google —producidos finalmente por HTC—, pero las diferencias en el planteamiento acabaron cerrando toda puerta a un acuerdo entre ambas compañías. Más concretamente, Google impuso a Huawei adoptar el papel de “fabricante de marca blanca”, lo que significa la desaparición de cualquier logotipo y/o referencia a Huawei tanto en los propios dispositivos como en el marketing de los Pixel. La decisión chocó con los intereses de Huawei, quien busca aumentar la visibilidad de su marca —especialmente en los Estados Unidos—, y las negociaciones entre ambas empresas llegaron a su fin.
La marca Huawei ya tiene un peso. Una situación muy diferente a la de hace diez años.
Y es que Huawei ya ha subido a la liga de los grandes. Durante varios años, el roadmap de la compañía se basó en desarrollar y comercializar dispositivos de marca blanca para otros fabricantes u operadores …