Hace algunos años, hice una prueba de manejo con un Mercedes nuevo. Fue magnífico. El vendedor me llevó de paseo y fui dueño del camino, di la vuelta en cada esquina a velocidades impensables, mientras me decía cuántos caballos de fuerzas tenía el auto y cómo podía ir de cero a 60 en cinco segundos; y después seguí acelerando hasta que llegué a los 249.448 kilómetros por hora. Fue increíble. Y también fue algo completamente sin sentido.
Sospecho que soy igual a la mayoría de las personas cuando se trata de comprar automóviles. El tiempo de cero a 60 está bien...Lee la nota completa: ¿Por qué es similar realizar videoconferencias y comprar un automóvil? en WebAdictosEncuéntranos en Twitter @webadictos y Facebook facebook.com/WebAdictos