Antes de empezar les quiero decir que no voy hacer de esta colaboración el diario del niño que un día fui y que le encantaba jugar pokémon porque era parte de un todo en la época en la que mi niñez transcurrió. Más bien, les pretendo contar una historia que me lleva al punto donde hoy nos encontramos y que fue el inicio de mi pasión por los videojuegos.