Star Wars es un clásico de ciencia ficción indiscutible. Con once películas, series animadas, spin-offs live-action, cómics, videojuegos y hasta novelas en su haber, el universo creado por George Lucas se ha extendido en todos los formatos posibles. Ante la trascendencia de esta franquicia, era inevitable que alguien quisiera parodiarla, y no solo logró... la hizo un clásico de culto.
En una galaxia muy, muy... pero muy lejana, un planeta ha agotado su suministro de aire. Será entonces que su líder planeará "robar" la atmósfera de otro mundo llamado Druidia a través del secuestro de la princesa Vespa. Pero para lograrlo, Dark Helmet se las tendrá que ver con Lone Starr. Esto es: S.O.S. Hay un loco suelto en el espacio.
El guionista, productor y director de comedia Mel Brooks tomó todas las referencias posibles a la producción original para moldearlo a situaciones burdas, sosas y sarcásticas, pero que encajan a la perfección. Desde el icónico traje de Darth Vader, las naves espaciales y hasta el propio Chewbacca, todo encaja a modo de burla.
Estrenada en 1987 con Bill Pullman, John Candy y Rick Moranis en los papeles protagónicos, el filme es tan descarado que utiliza todos los personajes principales de la Star Wars original. Sin embargo, su esencia es meramente utilizarlos en situaciones irreverentes llenas de meta-comedia y hasta se dan el lujo de romper la cuarta pared.
No conforme, también se pueden encontrar …