Orson Welles nos habla de la simple y milenaria virtud que permitió la realización de "la mejor película de todos los tiempos".
—No hagas ruido que tu mamá está durmiendo.
—¿Por qué?
—Porque está cansada.
—Y... ¿Por qué?
—Porque trabajó mucho.
—¿Y por qué trabajó mucho?
—Porque te quiere mucho.
—¿Sí papi? ¿Me quiere mucho? ¿Por qué?
En la vida de … Seguir leyendo...