Para muchos estacionarse es todo un ritual que incluye bajar el volumen de la música justo antes de comenzar a maniobrar en un espacio complicado. Esto no solo es una extraña manía sino una acción estrechamente relacionada con cómo el cerebro humano optimiza la concentración en momentos críticos.
Según Victoria Bayón, especialista en optimización cerebral, el cerebro tiene un límite en su capacidad para procesar información. Cuando se trata de intentar realizar una tarea exigente, como estacionarse en un lugar estrecho, este órgano se ve en la necesidad de reducir los estímulos para concentrarse al máximo en dicha tarea.
El efecto de la música y otros estímulos en nuestra atención
La música puede parecer solo un fondo para crear ambiente mientras se realiza una tarea. Sin embargo, esta se convierte en información adicional que el cerebro debe procesar junto a la actividad principal. El esfuerzo es mayor cuando se escuchan canciones con letra, pues estas son mucho más exigentes para el cerebro.
"Cuando aparcamos, nuestro cerebro necesita enfocar toda su atención, y la música, aunque parezca que no, está ocupando un espacio valioso que podría estar mejor dedicado a la tarea que tenemos por delante"
Victoria Bayón, Neurocoach
Explicó que cuando se realiza una tarea importante se requiere de gran precisión. Para destinarle toda su concentración, el cerebro elimina todo lo que en ese momento resulte superfluo. Es por eso que cuando alguien se estaciona instintivamente baja el volumen o deja de …