Hace más de 15 años Bryan Singer, quien venía de dirigir joyas como Sospechosos Comunes, podría decirse que inauguró el género de súper héroes contemporáneo. En 2000, el cineasta llevó con mucha dignidad la historia de Charles Xavier y sus mutantes en la primera cinta de X-Men. Allí, estelares actuales como Hugh Jackman se consagraron interpretando a personajes clásicos de la historieta como Wolverine. Era una época en la cual, todavía, las cintas de súper héroes eran más un riesgo que una garantía en taquilla.