Microsoft va a enfrentarse a partir de mañana a las autoridades de Estados Unidos que reclaman acceder a los datos que la compañía almacena fuera de las fronteras del país. La Corte Suprema escuchará este martes cuáles son los argumentos para que el Departamento de Justicia estadounidense pueda obligar a las empresas nacionales a entregar datos que almacenan en servidores de otros países.
Los jueces del tribunal de mayor rango existente en los Estados Unidos considerarán una pregunta que el Congreso del país probablemente no pensó cuando hace más de tres décadas aprobó la Ley de Almacenamiento de las Comunicaciones: ¿Un proveedor de correo electrónico ubicado en los Estados Unidos está obligado a entregar correos electrónicos que almacena en el extranjero? Microsoft sostiene que no, mientras que el Gobierno federal opina todo lo contrario. La decisión tendrá implicaciones más allá de Redmond.
Una valoración con implicaciones para la privacidad de muchos
La postura que defiende Microsoft ante esta cuestión es clara: dado que la legislación estadounidense únicamente se aplica dentro de las fronteras estadounidenses, la mencionada ley no permite obtener correos electrónicos almacenados en el extranjero. El punto de las autoridades del país es que la compañía tecnológica tiene el control de los datos dentro de Estados Unidos y es, además, una empresa del país.
Estas discrepancias comenzaron cuando Microsoft se negó a entregar los datos de una cuenta de correo electrónico cuyos datos se almacenaban en un servidor de la compañía ubicado en Dublín, Irlanda. Sucedió en 2013.
Un …