En una operación sorpresa, que se completará en algún momento de 2016, Microsoft sigue expandiendo el alcance de su dominio en internet con la compra de LinkedIn, esa red social que es como kryptonita para el desempleo. Los de Redmond pagarán $26.2 mil millones de dólares por su nuevo caprichito. Al parecer, lo que Microsoft quiere es frenar el avance de Facebook en la red enfocándose en empresas como LinkedIn, que han brincado al mundo de las apps con éxito. “Durante los últimos 13 años, hemos tenido una posición única al conectar profesionales para ayudarlos a ser más productivos y