Uno podría pensar que, en ciertos temas, las soluciones en cómputo ya están dadas. Por ejemplo, los correctores ortográficos hacen bastante bien la tarea encomendada, aunque evidentemente no son perfectos. Un problema es que estos programas reconocen cuando se escriben mal las palabras basándose en un diccionario el cual consultan a gran velocidad. Pero en […]