Las palabras que esperas leer cuando te informas del procesador que equipan los nuevos iPhone son las clásicas: más núcleos, más potencia, más eficiencia en menos consumo. Y son precisamente las que tenemos. El A11 Bionic cuenta con 6 núcleos, dos de ellos dedicados a tareas de alto rendimiento un 25% más potentes que en el A10 Fusion. Y los otros cuatro núcleos, un 70% más rápidos.
Pero lo que sorprende de verdad es cuando realmente pones los resultados de esas mejoras en las pruebas de GeekBench. Y sobretodo, cuando comparas esos resultados con los de otros procesadores. Los otros procesadores móviles se han quedado tan atrás que ya hay que coger los Core i5 y Core i7 para poder contrastar las cifras en condiciones.
A11 Bionic vs MacBook Pro 15" 2015 Mid w/ 4870HQ… pic.twitter.com/XAAUFzntmi— Lucka (@LuckaZhao) 13 de septiembre de 2017
En este tuit tenéis un ejemplo: El A11 Bionic supera en rendimiento de núcleo simple a un MacBook Pro de 2015, y roza el rendimiento de varios núcleos de ese mismo ordenador. Otros resultados dan cifras ligeramente más reducidas pero igual de preocupantes para Intel, que ve como un iPhone empieza a igualar el rendimiento de sus procesadores de portátil:
Looking at iPhone 8/X benchmarks. Android / Qualcomm left so far back in the dust now it's irrelevant. RIP Intel pic.twitter.com/mlVlGOXhlS— Jeff Atwood (@codinghorror) 12 de septiembre de 2017
Tengamos en cuenta el contexto, pero también las posibilidades
Estas cifras son desde luego sorprendentes y nos dejan …