La pasión de los bolivianos por los vehículos rusos les llevó hace 3 años a crear un club, que al inicio contaba con apenas seis miembros. Nos dimos a la tarea de buscar socios, cuenta Freddy Herrera Añez, presidente del club Niva en Santa Cruz, poseedor de un Niva modelo 98, quien además entusiasmó a su hijo.