Cuando nos enfrentamos a un brote infeccioso, la velocidad de respuesta de las autoridades sanitarias resulta clave para evitar que se salga de control. Pero todo se complica si está implicado un país con fama de compartir tarde con la comunidad internacional información fiable sobre enfermedades o catástrofes naturales.
Por eso, cuando el pasado 9 de enero la OMS hizo pública finalmente la existencia de un brote de coronavirus, una enfermedad infecciosa similar a la gripe en la ciudad china de Wuhan, los organismos de control de enfermedades de EE.UU. habían detectado que algo ocurría ya unos días antes, el 6 de enero.
BlueDot lo supo antes
Pero quien se adelantó a la hora de detectar los primeros indicios del último brote de coronavirus fue una compañía canadiense llamada BlueDot. Y eso fue posible gracias a un algoritmo basado en inteligencia artificial capaz de anticipar la aparición de brotes rastreando múltiples fuentes de información online.
En Xataka
Cómo se intenta parar una epidemia como la del coronavirus Wuhan para que no se extienda por todo el mundo
Según explica Kamram Khan, fundador y CEO de la compañía,
"Sabemos que no se puede confiar en que los gobiernos proporcionen información a tiempo. Nosotros recopilamos noticias de posibles brotes, pequeños murmullos en foros o blogs que indican algún tipo de evento inusual".
Esto es posible gracias a técnicas de procesamiento de lenguaje natural que le permiten analizar información en …