La herramienta Ejecutar de Windows es muy útil para abrir aplicaciones ocultas o poco visibles, pero podemos hacer mucho más con ella.
Es inevitable que un sistema operativo de la envergadura de Windows tenga herramientas y opciones ocultas a la vista, algunas porque no son para uso público y otras porque, simplemente, no interesan al usuario básico.
Una de las herramientas que nos permiten lanzar o abrir esas utilidades ocultas es Ejecutar de Windows, una pequeña ventana que podemos abrir desde el menú Inicio o pulsando las teclas Windows + R. Su propósito va más allá de abrir archivos o aplicaciones, tal y como vimos en un artículo anterior titulado Utilidades que puedes abrir desde el comando Ejecutar de Windows.

Además de ser práctico para abrir la Configuración del sistema (msconfig), el Registro de Windows (regedit), el Panel de Control (control) o el Administrador de tareas (taskmgr), la herramienta Ejecutar de Windows puede realizar tareas más concretas, como por ejemplo abrir una unidad de disco concreta en el Explorador de Windows escribiendo la letra de la unidad seguida de dos puntos. O si lo prefieres, podemos abrir el teclado virtual o teclado en pantalla con la orden osk.
Y entre sus muchas ventajas, también encontramos órdenes propias de la línea de comandos que podemos ejecutar directamente.
Apagar o reiniciar
Aunque normalmente apagamos, cerramos sesión o reiniciamos el PC desde el botón correspondiente del menú Inicio o menú Windows, en ocasiones no es tan fácil por culpa de aplicaciones colgadas o que ralentizan el ordenador.

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