Una tendencia viral respaldada por celebridades promete mejorar el sueño, pero podría esconder riesgos preocupantes. Dormir con la boca tapada gana adeptos en redes sociales, aunque los estudios advierten posibles consecuencias graves. ¿Estamos siguiendo un consejo saludable o cayendo en una trampa peligrosa disfrazada de bienestar?