Llevamos años hablando de los iPhone pero quizás se nos olvida que podemos conseguir con ellos. Capturar momentos no es sólo lo importante: también es hacerlo tal y como los vivimos. ¿Cómo se "enseña" a un sensor a capturar sensaciones más allá de la técnica? Gracias a cómo cada modelo interpreta la toma, podemos tener una aproximación realista más allá de los megapíxeles. Más allá de la pantalla, lo que se nos queda, lo que queremos recordar.
Cuando analizamos el iPhone 16 Pro y el iPhone 16e, los extremos más opuestos de la gama, quizás esto se quedó pendiente. Para remediarlo, los he estado probando frente a frente durante una semana en una ciudad perfecta para fotografíar y vivir de forma diferente: Nueva York. ¿Es justo comparar estos dos modelos que a priori están enfocados a usuarios diferentes? Mi respuesta es sí: no para decir que el iPhone 16 Pro es bueno (eso ya lo sabemos) sino para que poner en valor que el iPhone 16e puede medirse con su hermano mayor sin problemas. Y que para todos aquellos que dudan de su capacidad fotográfica, puedan ver como rinde.
Paseo fotográfico, Jony Ive y Sam Altman, la WWDC25
Recorrí las calles de Nueva York con Ezequiel Gómez y Marc Alonso, responsables de marketing y contenidos respectivamente en Rossellimac. Y junto a ellos, analizo cómo hicimos las pruebas, cuales fueran sus impresiones mientras lo estábamos probando y además, una recomendación fantástica de tres aplicaciones para …